Con nuestras guías de viaje para familias por ciudades descubrirás itinerarios reales que hemos vivido en primera persona, consejos sinceros, datos históricos interesantes y los mejores planes para disfrutar en familia en destinos como Nueva York, Londres, Oporto, Dublín y muchas otras ciudades.
La mayoría de ellas las eligimos de manera conjunta con él y ella, y si no, las elegimos pensando en que puedan gustarles. Les encanta viajar, y creemos que es genial para ellos descubrir lo diferente que puede ser el mundo.
Desde luego que sí. Si algo no nos gusta por una cuestión de servicio, etc., lo contamos, intentando siempre ser positivos y hacer críticas constructivas que aporten valor. No entraremos en detalles sobre gustos personales, pero sí, si un lugar no cumple con lo que esperamos de él.
Sí, pero depende mucho de cada familia y, particularmente, de cada niño o niña. La primera vez que fuimos a Nueva York fue cuando nuestro hijo menor tenía 8 años y nuestra hija 10, y lo disfrutaron muchísimo, y nosotros con ellos. Nuestra hija olvidó mucho con el tiempo, pero nuestro hijo apenas recordaba nada, solo que le encantó. En nuestro segundo viaje, él ya tenía 15 años y realmente lo disfrutó mucho más. Hay que tener en cuenta que, a nuestra manera de verlo, para disfrutar de una gran ciudad como Nueva York, hay que estar dispuesto a caminar mucho.
A nuestros hijo e hija les apasionan los deportes, especialmente el fútbol y el baloncesto, y siempre buscan los campos más emblemáticos de cada ciudad que visitamos. Aunque, para nosotros, al principio era un «tostón», decidimos hacer algo diferente: caminar hasta ellos desde el centro de la ciudad. Esta forma de viajar nos permitió explorar zonas menos turísticas, alejadas de los recorridos típicos.
Este enfoque nos ha llevado a descubrir barrios menos conocidos pero llenos de encanto. Por ejemplo, en Fulham nos sorprendieron sus elegantes casas. Otros, como el paseo desde la salida de metro hasta el estadio de Tottenham, nos llevaron por un barrio treméndamente más humilde y auténtico. Pero todo esto forma parte de la experiencia de descubrir una ciudad a través de los intereses de cada uno.
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No tienen que encantarnos todos los lugares que visitamos, pero elegimos los viajes que nos entusiasman a todos, de manera consensuada. Si alguna ciudad es descartada por alguno de los cuatro, simplemente cambiamos el plan. Llevarles a una ciudad que no les gusta creemos que no es lo más divertido para todos.
Les pedimos que hagan una lista de lo que quieren ver y comer—¡sí, también de los restaurantes! Luego organizamos los días en función de sus sugerencias, y siempre dejamos algo de espacio para improvisar.
Sí, respondemos a todos—de forma privada por ahora. El blog es nuevo, así que estamos manteniendo la privacidad al máximo. ¡Muchas de las preguntas frecuentes aquí realmente provienen de vuestros mensajes!
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Las grandes ciudades pueden resultar abrumadoras. Nosotros empezamos a visitar lugares como París, Londres y Nueva York cuando nuestro hijo menor tenía 8 años podía caminar muchos km en un día sin excesivos problemas y hacer turismo así se puede hacer. Si tus hijos o hijas tienen más de 8 años, ve a donde quieras, solo planealo pensando en ellos. De lo contrario, el viaje podría ser un pequeño infierno.
